Emprendedores
Tres amigos con las mismas ideas que crearon Nexun, un centro de entrenamiento, en Mutilva
La empresa, fundada en enero de 2024, cuenta ya con unos 170 clientes
Actualizado el 04/05/2024 a las 16:14
Se puede decir que a Nexun le va bien. “Cuando empezamos diseñamos un plan de viabilidad con la asesoría y a día de hoy hemos cumplido con las expectativas de facturación, clientela...”, reconoce Álvaro Martinicorena Huguet, cofundador de este centro de entrenamiento junto a Guillermo Arbeloa Castiella y Javier Martins Pereira. Es cierto que todavía es pronto para poner nota a un negocio que abrieron el pasado mes de enero, pero el número de clientes, que ya alcanza los 160, el triple servicio que ofrecen y la tendencia en la sociedad al autocuidado apuntan a un buen inicio de la empresa.
“Nexun es un proyecto que surge de tres amigos realmente”, explica Arbeloa sentado en una pequeña sala de recepción separada por un biombo de la superficie de entrenamiento. Allí hay pesas de todos los tamaños y tipos, dos máquinas que simulan la actividad de esquí nórdico, dos bicicletas de aire y otras herramientas propias de un centro de estas características. La diferencia es que al fondo a la izquierda de la nave hay una puerta en la que pone rotulado: “nexun rehabilitación y fisioterapia”.
“La salud tiene que englobar el entrenamiento, la rehabilitación, fisioterapia y otros aspectos que tenemos intención de implementar ahora”, reflexiona Guillermo Arbeloa sobre una idea que comparten los tres fundadores y que precisamente fue lo que les impulsó para dar el paso definitivo hacia la creación de la empresa. “Nos lanzamos a crear el proyecto y en enero, después de muchos meses trabajando en ello, abrimos las puertas del centro”, apunta.
Según explican estos tres emprendedores, que coincidieron trabajando en otro centro de entrenamiento anteriormente, llevaban tiempo queriendo “hacer algo”, pero no se daban las condiciones necesarias. “Tuvimos la oportunidad de esta nave, que reunía las necesidades para poder hacerlo y nos lanzamos, le dijimos a la inmobiliaria que nos la quedábamos”, recuerda parte del equipo Nexun, que a día de hoy lo conforman cinco personas en total, tres fisioterapeutas y dos entrenadores.
A partir de ese momento, los tres socios pasaron a dedicar todas sus jornadas a la preparación de la nave y el diseño del negocio. “Lo más difícil de emprender es no saber cuál es el siguiente paso que hay que dar”, comenta Javier Martins, graduado en INEF en Vitoria y en Fisioterapia por la UPNA en el campus de Tudela. “Siempre preguntas, unos te dice una cosa, otros otra... entonces en ocasiones falta ese acompañamiento”, añade. “En nuestro caso hemos tenido suerte. Tenemos muchos conocidos en diferentes gremios, hemos estado bien asesorados, en tema de seguros por un lado, electricidad por otro...”, ejemplifica asegurando que lo han conseguido preguntando y pidiendo ayuda.
ILUSIÓN, LA CLAVE
“Hay que tener ilusión porque aquí se meten muchas horas, y si no la tienes... te quemas”, indica Javier Martins. Nexun abre sus puertas a partir de las 06.30 horas y las cierra sobre las 21.00 horas. Jornadas largas en una nave por la que pasan clientes para recuperarse de sus lesiones, especialmente de las de rodilla, ponerse a punto para competiciones deportivas y por salud.
“Ahora mismo tendremos unos quince clientes recuperándose de roturas de cruzado”, comenta Arbeloa sobre una de las lesiones más frecuentes. Los fundadores creen que la acogida que han tenido se debe a los círculos de gente que conocían de su paso previo por otras empresas del sector y por el “boca a boca” además de las redes sociales.
Ahora, de cara a verano, reconocen haber notado un “pequeño pico” de inscripciones. Ante la necesidad de seguir manteniendo la calidad ofertada y la flexibilidad en horarios, apuntan, han cerrado las plazas del entrenamiento grupal hasta junio y han incorporado más personal para “dar mejor atención”. Nexun crece poco a poco desde enero y ya se prepara para la próxima campaña aunque avisan que esto no para. “Sólo en Sanfermines y porque la gente no viene”, ríen. Ilusión, ganas de hacer algo y esperar al momento para emprender, los tres pilares del centro ubicado en el polígono de Mutilva Baja.
